En un mercado laboral cada vez más competitivo, el currículum vitae o CV sigue siendo la primera puerta de entrada a una oportunidad profesional. Es tu carta de presentación, tu herramienta de marketing personal y, en muchos casos, tu primer filtro a la hora de buscar trabajo.
Tener un CV desactualizado, genérico o mal enfocado puede significar quedar fuera del proceso de selección desde el primer momento, sin dejarnos oportunidad de demostrar nuestra valía en momentos posteriores del proceso de reclutamiento, como las fases de posibles exámenes o de entrevista.
Por eso en este post te vamos a compartir algunos tips que, desde nuestra experiencia, resultan clave para sortear esta gran tarea que es tener un CV optimizado para destacar en la búsqueda de empleo en este nuevo comienzo laboral en España.
El CV como espejo de tus fortalezas
¿Qué valor aporta esta persona a mi organización? Es esa, muy probablemente, la pregunta que todo empleador o reclutador tiene en mente. Por tanto, nuestro CV debería ser capaz de responderla de forma clara y atractiva.
Y es que un buen CV no es simplemente una cronología de empleos o títulos académicos. Es un reflejo estratégico de tus fortalezas, logros y potencial.
Actualizar tu currículum no significa solo añadir el último empleo, sino revisar el contenido para alinearlo con tus objetivos actuales, destacar lo más relevante según el perfil que deseas proyectar y eliminar, también, lo que no aporta, según sea el caso.
¿Qué miran los reclutadores?
Lo primero que habría que decir es que cuando hablamos de reclutadores no solo debemos imaginar personas dedicadas a este proceso, sino, cada vez más, a sistemas que utilizan herramientas automatizadas para filtrar currículums, programar entrevistas y gestionar bases de datos de talento.
Sea una persona, o un sistema automatizado, lo cierto es que los procesos de selección de candidatos cada vez se intentan optimizar más, basando sus protocolos en detectar, por ejemplo, si se cumplen los requisitos relacionados con formación académica o experiencia específica demandada; palabras claveque coincidan con la descripción del puesto; o competencias y habilidades específicas que se priorizan en el perfil anunciado.
Partiendo de ello, no es difícil suponer que son muchos los desafíos que vencer a la hora de elaborar un CV que se intente corresponder estratégicamente a los parámetros que los empleadores presuntamente medirán en ese primer proceso de filtrado.
En cualquier caso, nuestra sugerencia es abocarse a escribir un currículum con la mira puesta en estos tres principios: una estructura ordenada, una narrativa lógica y una clara orientación a resultados.
¿Eso cómo se traduce en nuestro CV? Aquí te dejamos un listado con los componentes que, como generalidad, recomendamos incluir en tu currículum.
¿Qué elementos esenciales no deben faltar en un buen CV?
Punto más, punto menos, he aquí propuesta de aquellos aspectos que, según nuestra experiencia, deben estar presentes en todo currículum:
- Datos personales y contacto: nombre completo, email profesional, teléfono, enlace a LinkedIn. No es necesario poner tu dirección postal, solo con la ciudad y el país donde vives es suficiente.
- Resumen profesional o perfil: un párrafo breve que defina tu propuesta de valor.
- Experiencia profesional: en orden cronológico inverso, con fechas claras, responsabilidades y logros.
- Formación académica: titulaciones relevantes, con fecha e institución.
- Habilidades: técnicas (hard skills) y personales (soft skills), alineadas con el perfil al que postulas.
- Idiomas: nivel real, utilizando escalas reconocidas (A1, B2, nativo, etc.).
- Certificaciones y cursos: solo los que aporten valor al puesto objetivo.
- Adaptación al puesto: usa palabras clave y enfoca el contenido al tipo de empleo que buscas.
- Diseño limpio y profesional: tipografía legible, uso de negritas y espaciado adecuado.
- Revisión minuciosa: ortografía, gramática y coherencia.
- Concisión: idealmente debe ocupar una página bien maquetada, o máximo dos, en casos donde la experiencia profesional sea más extensa.
¿Que tener un buen CV será garantía para obtener ese empleo que añoras? Pues no, o al menos no necesariamente. En un mercado tan competitivo, donde tantas variables influirán en que seas o no la persona elegida, es difícil pensar que algo solo lo consiga. Pero tener un currículum óptimo, enfocado en hacerte distinguir con una propuesta de valor claramente expuesta, será, sin dudas, una carta a tu favor, posiblemente la única que podrás controlar. Entonces, ¡a por ello!
